Día Mundial de la Justicia Social: Reflexión y Acción hacia un Futuro Equitativo

La OIT y su Rol en la Promoción de la Justicia Social

La Organización Internacional del Trabajo (OIT), desde su creación en 1919, ha desempeñado un papel clave en la promoción de la justicia social a nivel global. A través de la creación de normas internacionales, la OIT busca garantizar condiciones laborales dignas, proteger los derechos de los trabajadores y erradicar problemas como el trabajo infantil y el trabajo forzoso. Sus convenios y recomendaciones han sido esenciales para reducir desigualdades y fomentar sociedades más equitativas y sostenibles.

Los Desafíos Globales Según la OIT

La OIT destaca cifras alarmantes sobre las desigualdades económicas que persisten en el mundo. Según la OIT (2023), “4.000 millones de personas no tienen protección social, 453 millones buscan empleo sin éxito y 214 millones trabajan pero viven con menos de 1.90 dólares al día” (Organización Internacional del Trabajo, 2023, sección “Una necesidad apremiante de abordar la desigualdad”). Estos datos reflejan la grave situación de millones de personas que, a pesar de su esfuerzo, no logran acceder a condiciones de vida dignas debido a la falta de empleo, la precariedad laboral y la ausencia de una red de protección social.

La Celebración del Día Mundial de la Justicia Social

El Día Mundial de la Justicia Social, celebrado cada 20 de febrero desde 2007, busca llamar la atención sobre la necesidad de enfrentar las desigualdades sociales. Este año, la OIT organiza una serie de cinco eventos en distintas ciudades del mundo para promover un diálogo global sobre cómo colocar la justicia social en el centro de las agendas políticas internacionales, nacionales y regionales. Estos encuentros buscan generar compromisos y acciones concretas para mejorar las condiciones de vida de las personas más vulnerables. Entre los temas clave que se abordarán están la protección social universal en salud en Asia y el Pacífico, el impacto de la inteligencia artificial en el mercado laboral, la promoción del trabajo decente en África, la necesidad de un nuevo contrato social para América Latina y el fortalecimiento de una transición justa hacia un futuro sostenible (Organización Internacional del Trabajo, 2025).

Cómo la Justicia Social Impacta el Futuro

La justicia social es esencial para construir sociedades más justas y sostenibles. Garantizar igualdad de oportunidades en el acceso al empleo, la educación y el bienestar social no solo ayuda a reducir la pobreza, sino que también fomenta la paz y la cohesión social. El Día Mundial de la Justicia Social resalta cómo la acción colectiva y la cooperación entre gobiernos, organizaciones y la sociedad civil pueden generar cambios positivos en la vida de millones de personas alrededor del mundo.

El Compromiso de UNICLA con la Justicia Social

Es crucial que instituciones como la Universidad Contemporánea de las Américas reflexionen sobre el Día Mundial de la Justicia Social, ya que este evento promueve valores fundamentales como la igualdad, la equidad y el acceso a oportunidades, temas clave para la formación integral de los estudiantes. Con su amplia oferta educativa en áreas como salud, económico-administrativa, humanidades e innovación y tecnología, UNICLA tiene la oportunidad de contribuir al diálogo y la reflexión sobre cómo sus diversas disciplinas pueden abordar y solucionar problemas sociales.

Salud: En el contexto de la justicia social, los programas de salud de UNICLA promueven el acceso equitativo a servicios médicos de calidad para todos. A través de su formación académica, la universidad prepara a los estudiantes para ser profesionales comprometidos con la salud pública y la inclusión, contribuyendo activamente a la construcción de un sistema de salud más justo y accesible. Además, sus egresados están capacitados para trabajar en la mejora de la atención médica y la promoción de políticas que beneficien a las comunidades más vulnerables.

Económico-administrativa: Los estudiantes en estas áreas tienen el potencial de diseñar políticas públicas y estrategias empresariales que fomenten el empleo digno, la seguridad social y el desarrollo económico inclusivo, lo cual es esencial para reducir las desigualdades.

Humanidades: La formación en humanidades en UNICLA permite que los estudiantes reflexionen sobre las desigualdades sociales, políticas y culturales, y sobre cómo, a través de la educación y el pensamiento crítico, se puede contribuir a transformar estas realidades.

Innovación y tecnología: La tecnología es una herramienta clave para fomentar la inclusión social y la justicia. A través de la innovación, UNICLA puede contribuir a resolver desafíos sociales mediante soluciones tecnológicas que mejoren la educación, el acceso a la salud y la creación de empleos.